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Sesión previa al visionado

b. El escenario de la película

Con varias claves básicas podremos conocer mejor la situación de las mujeres en Argelia. Esta información nos permitirá entender cómo la familia de Zouina, cuando emigra a Francia, reproduce las mismas estructuras familiares patriarcales que rigen la sociedad argelina en la década de los 70.

01. Mujeres argelinas. Situación social y apuntes históricos

Mujer argelina en Timimoun

Pie de foto: Mujer argelina en Timimoun. Por lebeaupinagnes.

La situación social de las mujeres en Argelia ha variado de forma muy significativa, aunque todavía muy lentamente. En la década de los 60, la mayoría de las mujeres argelinas eran analfabetas (menos del 14% de mujeres estaban alfabetizadas, frente al 38% de los hombres) (1). Como consecuencia directa de esta falta de capacitación, el acceso de las mujeres al empleo era también muy limitado. No obstante, existía un trabajo femenino informal, no remunerado, ejercido en situaciones precarias, tanto en la agricultura como en la artesanía.

Un grupo de mujeres votan en una asamblea local

Pie de foto: Un grupo de mujeres votan en una asamblea local. Por Radio Nederland Wereldomroep.

Las mujeres tomaron conciencia de su situación de debilidad y vulnerabilidad desde los primeros años de la independencia. Antes se habían implicado en la Guerra de Liberación a todos los niveles. Los poderes públicos aprovecharon esta colaboración para emprender un esfuerzo especial en materia de escolarización. Por esta razón, en los años 70, se comprueba una mejora en la condición social de las mujeres, especialmente en la educación. Buena prueba de ello es el siguiente dato: “el analfabetismo ha retrocedido enormemente y ha pasado del 90% en 1956 al 24% en 2006, fecha en la que son analfabetos menos de un hombre de cada cinco y más de una mujer de cada tres” (2).

En materia de empleo, el número de mujeres ocupadas aumenta, aunque en 1987 la tasa total de mujeres activas era sólo del 10%. A partir de la década de los 90 se da un proceso de retroceso social. Según los últimos datos disponibles, “en 1998, la población activa femenina era de algo menos que de 1,4 millones, es decir, 13 veces más que en 1996” (3). Además, la discriminación salarial que afecta a estas mujeres es una constante.

02. Situación jurídica. Código de Familia

La desigualdad social que sufren las mujeres, se consagra con el Código de la Familia que institucionaliza un sometimiento cada vez mayor. Hasta 1984, fecha de promulgación de esta norma, la mujer no tenía necesidad de un tutor, ni de su consentimiento ni autorización para contraer matrimonio. En 1985, la nueva ley de “protección y promoción de la salud” suprime el “Código de la salud pública” de 1976, en el que se mencionaba que el Estado asumía la atención de las madres solteras y de la infancia abandonada.

El Código de la Familia autoriza la poligamia, vuelve a instituir la figura del tutor, autoriza el repudio y desautoriza a las mujeres a participar en su patrimonio. En febrero 1997 aparece un “Anteproyecto de Ley relativo a la enmienda de la ley nº84-11 del 9 de junio de 1984 del Código de Familia”. No obstante, se mantiene la poligamia (artículo 8); la tutoría que las hace menores de edad de por vida (artíc. 11) y la desigualdad entre hombres y mujeres, tanto en el matrimonio como en el divorcio (artículos 39 y 48).

Asimismo, en 2005 se vuelve a efectuar una nueva reforma del Código, que claramente resulta insuficiente y no satisface las expectativas de las mujeres argelinas.

03. Matrimonio y mujeres en Argelia

Mujeres esperan durante la boda

Pie de foto: Mujeres esperan durante la boda. Por Claude Srpinger.

El matrimonio ocupa un lugar clave en la sociedad argelina, como en todas las sociedades árabes-musulmanas. La familia es la base de la organización social. Por tanto, el artículo 2 del Código de Familia establece la familia como la célula básica de la sociedad. Es un elemento primordial en la vida de las mujeres, cuyo deber y función más evidente -como en el resto de sociedades patriarcales- es ser esposas, madres y amas de casa. El matrimonio vincula a las mujeres con la virginidad y a su vez con el honor de las sociedades, ya que la sexualidad no está bien vista fuera del ámbito matrimonial.

El modelo tradicional de matrimonio árabe-musulmán, que tan bien refleja la película, tiene unas características propias: las mujeres se casan con una media de edad de veinte años, de manera que no existe apenas tránsito entre la infancia y el matrimonio. Este aspecto proporciona a los hombres dos privilegios: al privilegio de la autoridad masculina se le suma el privilegio derivado de que los esposos sean de mayor edad que las esposas, lo que de nuevo incrementa las desigualdades. Ignorantes y analfabetas, no tienen más destino que estar confinadas en el espacio doméstico del hogar.

La elección de las parejas es más un asunto familiar que personal. El sistema de alianzas en el mundo árabe ha pasado en buena medida por concertar matrimonios. Al casarse, las mujeres abandonan su familia y pasan a pertenecer a la familia de sus maridos. Se cambia la autoridad de padres y hermanos por la de la familia política. En la familia extensa tradicional (´aila), los hijos varones que se casan permanecen en el hogar de sus padres y viven ahí con su descendencia, en lugar de fundar uno propio. La vigilancia que ejerce la familia del marido, especialmente la suegra, no favorece ni la intimidad ni las relaciones igualitarias.

En la actualidad, a partir de la incorporación a la educación y al mercado laboral, en Argelia se ha retrasado considerablemente la edad en la que las mujeres contraen matrimonio (4). Otra realidad manifiesta, vinculada directamente con el matrimonio y las relaciones familiares, es el acceso de las mujeres a los métodos anticonceptivos.

04. La figura de la suegra para perpetuar el orden tradicional

Una anciana curiosea desde su ventana

Pie de foto: Una anciana curiosea desde su ventana. Por Rafa Sanchís.

En la sociedad argelina se da un caso curioso. Cuando las mujeres pasan a ser suegras, adquieren poderes masculinos y se convierten en guardianas de las normas y cultura patriarcal. Tiene el poder de elegir a su nuera. Las nueras deben obediencia a su suegra, además de al marido.

La posición de las mujeres en la familia depende de la edad. Cuando se es una esposa joven, se debe de ser obediente y sumisa. En caso de ser madre, se adquiere cierto reconocimiento, ya que se está cumpliendo con el papel que asigna la sociedad. Si se es suegra, madre de un hombre, velar por el control familiar le da autoridad y autonomía. Sin embargo, en las últimas décadas, los cambios apuntados antes han posibilitado que la figura de la suegra tenga un peso menor en las organizaciones familiares.

05. Resistencia, cambio y transformaciones

La activista Louisa Hanoune durante un mítin

Pie de foto: La activista Louisa Hanoune durante un mítin. De ILC Info.

También vale la pena tener en cuenta los avances y problemas de las mujeres argelinas en cuanto a la participación política. Dos ejemplos: Louisa Hanoune, activista feminista y líder del Partido de los Trabajadores de Argelia (PT) ha sido la primera mujer que se presentó a las elecciones presidenciales en 2004. Ahora trabaja a favor de aplicar medidas de discriminación positiva para aumentar la presencia de las mujeres en la vida política. A pesar de todo, sólo 30 mujeres tienen un escaño en la Asamblea Nacional (un total de 389 personas diputadas). Para saber más sobre la participación de las mujeres argelinas y su representación en los organismos públicos, lee este artículo (en francés).

Existen otros ejemplos de activismo por parte de las mujeres. Destacamos los testimonios de Faïka Medjahed, responsable del servicio de mujer, en el Instituto Nacional de la Salud Pública Argelina; Zohra Ounas, fundadora y miembro de la directiva de la Asociación AFEPEC; y Semhane Khelil, integrante del equipo de Solidaridad Internacional en Argelia.

06. Reagrupación familiar

Permiso de residencia

Pie de foto: Permiso de residencia. Por Viveiros.com.

En el contexto de la película es de vital importancia la figura jurídica de la reagrupación familiar, que permite a los extranjeros residentes legales solicitar que sus familiares se reúnan con ellos.

Existen unos requisitos básicos, como que el o la solicitante sea residente legal, que disponga de alojamiento y de medios económicos suficientes para sí y para su familia.

Como se recoge al inicio de la película, después de la 2ª Guerra Mundial, el gobierno francés necesitó mano de obra. Reclutó a trabajadores magrebíes, especialmente argelinos. En un primer momento, estos trabajadores eran exclusivamente hombres, a los que se prohibía residir en Francia con sus familias. En 1974, el gobierno de Jacques Chirac, para controlar la entrada de inmigrantes y supervisar también el envío de divisas, permitió que estos trabajadores que habían acudido solos trajeran legalmente a sus familias.

Para Zouina, la reagrupación familiar, lejos de significar un derecho, representa un atentado contra su libertad personal. Llega obligada, como esposa y ciudadana de segunda. No es libre para elegir su destino, por lo que su situación de inferioridad se acentuará en Francia.

Para saber más sobre la interpretación de la reagrupación familiar desde el feminismo, lee el artículo de Ndeye Andujar.

Notas a pie de página: